De su interés

Hay de aquellos que..

 

Hay de aquellos que a lo malo dicen bueno y a lo bueno dicen malo


¡Ay de los que a lo malo dicen bueno

y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas

y de las tinieblas luz; ¡que ponen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!

Isaias 5:20

Es muy interesante porque en estos días se cumplen estas palabras, ya que ahora se considera como algo completamente “normal” muchas prácticas que solo unos cuantos años atrás era degradables.

Este mundo está en el poder del inicuo (1 Juan 5:19) Sabemos que somos de Dios, pero el mundo entero está bajo el maligno.

Sabemos que todo lo que motiva el deseo de la carne, de los ojos, ¡y la exhibición ostentosa de lo material esto no se origina del Padre sino de este mundo! En (1 Juan 2:15-16) dice las escrituras: No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo.  Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo, por ejemplo (muy actual y que pasa en todo el mundo): Un joven en el colegio es buen estudiante, se viste bien, lleva bien cortado su cabello, se esfuerza por colaborar en clases, y obedecer a sus profesores, en realidad eso está BIEN, ¿pero que le dirían el resto de sus compañeros? Lo criticarían, dirían que es aburrido, que esta fuera de onda...Mientras que el que siempre llega tarde, nunca se preocupa por estudiar, falta o se fuga cuando quiere, y siempre se rebela ante los profesores, sí, ¡ahora le consideran que es el “Líder” como si fuera lo máximo! Pero en realidad, ¡todos sabemos que está MAL! 

Esto es un pequeñísimo ejemplo, pero se ha comprobado con asuntos muchos más grandes como: la desobediencia a los padres, la borrachera, la drogadicción, el homosexual ismo, la unión libre, el divorcio, el aborto, el materialismo, egocentrismo, deportes extremos, la ropa y arreglo personal, etc, etc...

Cuando sucede lo anterior se está llegando al límite máximo de la depravación, donde se confunden y se pierden los valores morales, se ha olvidado a Dios, ¿y en el desarrollo de estas cosas lamentables preguntamos el porqué de estas?; se ha endurecido la propia conciencia, se hacen mayor daño a sí mismos y a los demás, se cambian los principios de las cosas y a la ebriedad, a la codicia, al hurto, a la insensatez, a la falta de perdón, y por último los legisladores de los países están insertando en sus legislaciones los matrimonios entre hombres  y mujeres del mismo sexo, llegando al sodomismo; prácticas estas que se le llama buenas compañeras, ignorando que estas figuras irritan el corazón de Dios.

Los seres humanos se están dejando manosear por estas situaciones las cuales están llevando a la sociedad a un total degeneramiento, llegando al extremo, de manera tal que en un tiempo cercano tendrá repercusiones en juicio a la humanidad; sin embargo, se le toma como un juego o una burla o algo normal.

La falta de conocimiento a nadie exonera del juicio, así como la misma Ley humana a nadie exonera por su desconocimiento, cuanto más la justicia divina, la misma Palabra de Dios nos dice y mi pueblo fue destruido porque le falto conocimiento, (Oseas 4:6), por lo tanto, no se podrá decir que no sabía o no conocía la verdad, está escrita desde que existe la Palabra de Dios.

Dios jamás establece un juicio sin mandar el mensaje de arrepentimiento.

Hoy los medios están al servicio del pecado, se han convertido en focos de apetito sexual y de incitación al adulterio, a todos parece bien, hasta la comercialización de escenas de morbo, atiborrando las mentes desprotegidas de pensamientos de iniquidad llegando a la cauterización de sus propias conciencias.

Es cierto que la conciencia nos guía muchas veces, acusándonos o excusándonos de diversos asuntos, (Romanos 2:12-15) Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados; porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.

Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos, mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos, sin embargo, participamos de este mundo que esta direccionado a hacer lo malo.

Por ello sugerimos lo mejor, es estudiar las Escrituras en ellas se muestran principios que si los ponemos en práctica nos va bien además de tener una relación estrecha con nuestro Creador poder ser verdaderamente felices y en un futuro tener vida eterna.

No hay comentarios